Evitar todo aquello que genere un desperdicio innecesario.
Aprovechar los residuos para fabricar otras cosas, o darles otro uso.
Darle una segunda vida al papel antes de deshecharlo para así alargar su vida útil.
El reciclaje del papel permite dar una segunda vida a dicho material. Este se elabora a partir de pulpa de celulosa, material hecho a base de madera. Al terminar la cadena de reciclaje vuelve a ser útil de múltiples formas, a la vez que contribuye con el mantenimiento del medioambiente.
Reduce, recicla y reutiliza los productos, para alagar su vida útil.